La blefaroptosis ocurre cuando el margen palpebral superior cubre una parte del limbo corneal superior. Puede ser uni o bilateral y presentarse como cuadros de un descenso discreto hasta aquellos que presentan oclusión total de la hendidura palpebral, afectando la visión.
La blefaroptosis se puede clasificar en congénita y adquirida. La forma congénita es aquella que está presente desde el nacimiento y debe ser tratada cuando perjudica la visión o cuando el niño eleva el mentón para poder ver. Las ptosis palpebrales adquiridas se dividen según su etiología en: neurogénica, miogénica, mecánica, aponeurótica y traumática.
El tratamiento de la ptosis palpebral es planeado de acuerdo al origen de la ptosis y de la función del músculo elevador del párpado superior, determinando la mejor técnica quirúrgica a ser utilizada.
Es importante resaltar que la cirugía de corrección de la ptosis palpebral debe ser realizada por un oftalmólogo especialista en cirugía plástica ocular. Primordialmente, es este especialista quien tiene profundo conocimiento sobre la dinámica de los párpados y sobre las necesidades de protección de los ojos y de la visión.
ptosis congénita.
ptosis senil adquirida.
Blefaroespasmo escencial benigno
Distonía craneofacial focal caracterizada por espasmos repetidos y prolongados que afectan principalmente al músculo orbicular de los párpados, pero con el tiempo las contracciones musculares pueden afectar otros protractores palpebrales como el procerus, el corrugador superciliar y el frontal. Típicamente es bilateral, es una de las distonías focales más frecuentes de presentación en el adulto. Se produce con mayor frecuencia en mujeres y los síntomas suelen iniciarse durante la quinta o sexta década de la vida. El blefaroespasmo debe diferenciarse de otras causas de oclusión palpebral, como la ptosis palpebral secundaria a debilidad o parálisis del músculo orbicular de los párpados o la incapacidad para la apertura de los ojos, mal denominada «apraxia» provocada por la inhibición suprasegmentaria del músculo elevador del párpado.
Traumatismo palpebral
Quemadura, erosión, contusión o herida que afecta los párpados. Las heridas palpebrales pueden ser incisiones o avulsiones, puede o no estar comprometido el borde libre del párpado y puede asociarse a compromiso de la vía lagrimal. Es necesario una valoración exhaustiva de los párpados y las estructuras lesionadas para determinar el manejo o el plan operatorio. El objetivo principal es reestablecer la función protectora de los párpados y en la medida de lo posible restaurar la apariencia estética de los mismos.
Trauma palpebral con pérdida de párpado inferior.
5 días postoperatorio de colgajo tarsoconjuntival de Hughes con injerto libre de piel retroauricular.
1 mes postoperatorio de colgajo tarso-conjuntival de Hughes con injerto libre de piel retroauricular luego de apertura de Hughes.